La energía renovable ha cobrado una relevancia sin precedentes en los proyectos industriales y comerciales, y los Juegos Olímpicos no son la excepción. A medida que las ciudades anfitrionas buscan minimizar su huella de carbono, la implementación de tecnologías sostenibles se ha vuelto un pilar fundamental en la organización de este evento global.
Para los Juegos Olímpicos de 2024 en París, se ha establecido una ambiciosa meta: que el 100% de la energía empleada en las sedes de competición provenga de fuentes renovables. De acuerdo con National Geographic, este objetivo sigue la pauta establecida por Tokio en 2020, donde se logró que toda la energía utilizada en las sedes fuera de origen renovable.
En este sentido, París 2024 ha hecho provisión para que la electricidad sea suministrada por parques eólicos y solares. Por un lado, todas las sedes están conectadas a la red, esto les permite utilizar energía renovable sin necesidad de generadores diésel temporales y a su vez, reducen significativamente la huella de carbono.
EDF ha sido la compañía eléctrica francesa seleccionada por los organizadores, para ser el proveedor oficial de electricidad y gas de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024. Por un lado, instalaron una central solar de 400 m² en el río Sena, que es móvil, flotante y desmontable. Esta innovadora planta produce 78 kWp de electricidad, suficiente para cubrir el consumo energético de 94 departamentos de la Villa Olímpica. Por otro lado, instalaron una planta solar temporal en el techo de la estación de autobuses de la Villa, misma que contribuye a la red de las energías limpias.
Además, la Villa Olímpica cuenta con sistemas de refrigeración geotérmica en lugar del aire acondicionado tradicional, lo que aumenta aún más la eficiencia energética.
Uno de los aspectos más destacados de los Juegos Olímpicos de 2024 es la construcción del nuevo Centro Acuático de Saint-Denis, que forma parte de los pocos recintos de competición nuevos para este evento. Algo que hace destacar a este elemento es su arquitectura, que le permite minimizar los costes de energía.
Por un lado, cuenta con un tejado cubierto con 4.680 m² de paneles solares, que proporcionan alrededor del 20% de la electricidad que necesita el recinto. Por otro lado, el uso de ventanas en voladizo permite captar el máximo posible de luz natural.
El Centro Acuático de Saint-Denis no solo representa un avance arquitectónico significativo, sino que también ejemplifica cómo la integración de tecnologías sostenibles puede reducir el consumo energético y promover el uso de energía renovable.
Con su tejado solar y diseño eficiente en el uso de la luz natural, entre otras características, este recinto no solo minimiza los costes energéticos, sino que también establece un nuevo estándar para futuras infraestructuras deportivas y comerciales.
La implementación de energías renovables en proyectos industriales y comerciales es crucial por varias razones.
En el contexto de los Juegos Olímpicos, el uso de energías renovables no solo reduce la huella de carbono del evento, sino que también sirve como un poderoso ejemplo de lo que es posible lograr cuando se prioriza la sostenibilidad y la eficiencia energética.
Al mostrar al mundo que es factible organizar un evento de esta magnitud de manera sostenible, se envía un mensaje inspirador a otras ciudades y organizaciones.
Es hora de que todos, desde ciudadanos hasta líderes empresariales y gubernamentales, continuemos con la iniciativa de los Juegos Olímpicos de París 2024 y nos comprometamos con la transición hacia un futuro energético sostenible. Un buen primer paso es la inversión y la búsqueda de la energía de calidad en nuestras instalaciones.