El contexto empresarial actual requiere cada vez más acciones que minimicen el deterioro ambiental y en términos de eficiencia energética, ya no basta con tener sistemas de conexión eléctrica adecuados, dispositivos eficientes o un riguroso mantenimiento correctivo y preventivo a los componentes de red. Ahora, es prioritario tener iniciativas que ayuden a almacenar mayor cantidad de energía de manera más eficiente y segura, garantizando así la continuidad operativa y reduciendo costos de mantenimiento eléctrico.
En este sentido, las baterías de ion litio han empezado a jugar un rol esencial, ya que, por su versatilidad y capacidad para almacenar grandes cantidades de energía, pueden abastecer desde dispositivos electrónicos de uso cotidiano, como teléfonos móviles, computadoras y autos eléctricos, hasta suministrar energía a instalaciones industriales complejas, como centros de datos.
Las baterías de lithium o baterías de ion de litio son dispositivos de almacenamiento de energía, a diferencia de las baterías de Niquel Cadmio y las de plomo también son recargables ya que utilizan compuestos de litio como uno de sus electrodos. Estas baterías se han vuelto muy populares en aplicaciones como los autos eléctricos, debido a su alta densidad energética. De hecho, se espera que el mercado global de baterías de ion litio crezca 20% en un periodo de 5 años, alcanzando un tamaño de mercado de USD 200 mil millones para 2027, en comparación con los USD 57 mil millones registrados en 2020.
El funcionamiento de las baterías de ion litio se basa en el movimiento de iones de litio entre dos electrodos: el ánodo (electrodo negativo) y el cátodo (electrodo positivo), a través de un electrolito. Durante la carga, los iones de litio se trasladan del cátodo al ánodo, almacenándose allí y durante la descarga, el proceso se invierte de tal manera que los iones regresan al cátodo, liberando energía en el proceso.
Esta transferencia permite que las baterías se recarguen muchas veces sin perder capacidad significativamente, lo que las convierte en una opción ideal para aplicaciones que requieren ciclos frecuentes de carga y descarga, como los vehículos eléctricos y dispositivos electrónicos portátiles.
Las características de las baterías de ion litio están directamente relacionadas con sus beneficios para la sostenibilidad ambiental. Comparadas con otras tecnologías de baterías, las propiedades técnicas de las baterías de lithium contribuyen a un impacto positivo en el medio ambiente. Algunas características principales son:
Gracias a su costo – eficiencia, las baterías de ion litio tienen una amplia versatilidad de uso como, por ejemplo:
En instalaciones donde los servidores de datos son de gran volumen o fábricas con máquinas de operación continua, se usan las baterías de litio integradas en los sistemas de alimentación ininterrumpida (UPS) para proteger a los equipos de pérdida o inestabilidad del suministro de energía. A continuación, presentamos algunos aspectos clave sobre el uso de baterías de ion litio en UPS:
En conclusión, las baterías de ion litio están transformando la forma en que almacenamos y utilizamos la energía. Su eficiencia, flexibilidad y capacidad de soportar un uso intensivo las hacen una opción ideal para aplicaciones industriales y de consumo.